Esta mañana no
salimos a la hora prevista (6:00) pues aprovechamos para descansar bien ya que la
jornada sería larga. Descansar es un decir, pues la noche en “La Posada del
Rancho” no resultó tan reparadora para mí (Mónica); Finalmente, la mentada
posada, tan apacible como pareció en un primer momento, resultó muy bulliciosa
por lo que maldije varias veces en el correr de la noche. Por supuesto en la mañana, el
desayuno prometido para las 7:00 no estaba… lo que resultó mejor pues
aprovechamos para probar los tamales de pipíán con ají de maní que estaban
deliciosos. La vida por fuera de la capital es mucho más barata… Hoy
desayunamos por 5.700 pesos (cuatro tamales de pipián, cuatro pandebonos y
dos cafés). Ahora son las 18:49 del día sábado y aunque teníamos presupuestado
estar en Quito, hace dos horas nos encontramos en la frontera haciendo los
papeles… qué decir, es un despelote, cuando quisimos ingresar al Ecuador nos
atendieron en una ventanilla unos funcionarios muy desagradables que se ocupan
de mercancías decomisadas así que parten de la base que uno también es
“bagayero” (léase, contrabandista) y lo tratan a uno muy mal. Además, los
ecuatorianos hablan como gritadito… Ya sé que es la primera impresión, pero
impresión al fin. Como la idea era llegar a Quito hoy y esto no será posible,
seguramente dormiremos en Tulcán o en Ibarra. Las rutas de hoy: terribles… la
“autopista” Panamericana es un camino de herradura en ciertos lugares. El tramo
Popayán – Pasto es cansador pues la ruta está en muy mal estado, es muy
culebrera y muy angosta. Sólo al final del día (Pasto – Ipiales), la ruta
mejoró sensiblemente. Y aunque la ruta es una pesadilla, lo rescatable del día
de hoy fueron los paisajes: los del sur del departamento del Cauca son muy
lindos, pero a mi modo de ver, creo que los superan por mucho los de Nariño…
Ahí irán viendo foticos. Acaba de subirse al auto José Carlos y me dice que
acaba de hacer el “curso del paso por aduana” (como nadie nos explicó,
estuvimos haciendo trámites innecesarios, pero no sabíamos que con solo
presentar la libreta de paso por aduana, nos hubiéramos liberado hace rato). Esto
es todo por hoy, vamos a ver dónde nos agarra la noche…
Mónica, cheverísimo leerte.. acompañarlos en esta travesía es una alegria que nos trasmite este blog.... la mejor de las ideas para estar allá día a día con ustedes disfrutando del viaje!
ResponderEliminarGracias. Ahí te irás enterando de todo... Un abrazo.
EliminarEstamos viajando con uds. Un abrazo y buen viento.
ResponderEliminarGenial esta idea para seguirlos en su viaje. Abrazos.
ResponderEliminar